Efecto del tratamiento con CPAP (Presión positiva continua sobre la vía aérea) sobre las cifras tensiones en pacientes con apnea obstructiva del sueño e hipertensión arterial resistente al tratamiento. Ensayo clínico aleatorizado (HIPARCO), publicado en JAMA.
Dr. Miguel Ángel Martínez García
Hospital Universitari i Politècnic La Fe
¿Qué resaltaría del trabajo por el que ha sido premiado?
El aspecto no científico a resaltar es que ha sido el estudio con mayor participación que se ha realizado nunca sobre apnea de sueño en nuestro país (24 centros de toda España). Esto, además de suponer un reto interesante de coordinación al estar involucrados tantos centros, también supone la implicación de una gran cantidad de personas a las que quiero aprovechar esta ocasión para darles las gracias.
Desde un punto de vista científico, se trata del ensayo clínico de mayor tamaño realizado sobre el efecto del tratamiento con apnea del sueño (mediante CPAP) en pacientes con hipertensión arterial que no responden, o lo hacen sólo parcialmente, al tratamiento médico. Por lo tanto, la evidencia científica que se aporta con el presente estudio es de un gran peso específico y suficiente como para cambiar alguna de las pautas en el manejo de estos pacientes, que presentan un riesgo cardiovascular muy elevado.
Por último, es de destacar que tanto la apnea del sueño como la hipertensión arterial son dos problemas de salud pública de primer orden por la frecuencia tan elevada de casos que se dan entre la población.
¿Qué hallazgos se han conseguido con él?
Se ha descubierto que, hasta un 80% de los pacientes con hipertensión resistente al tratamiento presenta apnea del sueño y que, en aquellos pacientes que son tratados con CPAP, la presión arterial disminuye de forma tanto clínica como estadísticamente significativa en torno a 4-5 mmHg. Este descenso se logra en pacientes con hipertensión arterial con otras medidas como el ejercicio físico, la dieta hiposódica o algunos fármacos. Lo importante de este hallazgo es que los pacientes con HTA resistente al tratamiento presentan escasas alternativas terapéuticas y la CPAP les ofrece la posibilidad de controlar mejor sus cifras tensionales, además de otras ventajas clínicas si padecen apnea del sueño.
No hay que olvidar que el riesgo cardiovascular de estos individuos es muy elevado y que un descenso de las cifras tensionales como el que se consigue con CPAP es capaz de disminuir la probabilidad de un evento cardiovascular (infarto o ictus) en más de un 15-20%.